Signos de autismo que involucran manos
Los padres y los maestros suelen sospechar que un niño tiene autismo cuando se retrasan las habilidades de comunicación, como el habla, las instrucciones y la capacidad de interpretar las señales no verbales. Sin embargo, los niños con autismo también pueden presentar síntomas físicos, como disminución de la fuerza de las manos y el tono muscular, movimientos repetitivos de las manos, como aleteo y falta de coordinación ojo-mano. Además, los niños con autismo pueden demostrar una aversión a tocar objetos y ser tocados, lo que afecta el desarrollo de las manos..
Los niños con autismo pueden tener una disminución en la fuerza de las manos, el tono muscular y la coordinación. (Imagen: Comstock Images / Stockbyte / Getty Images)Defensividad Táctil
Los niños con defensiva táctil encuentran el toque aversivo. (Imagen: Natasa Blagojevic-Stokic / iStock / Getty Images)Muchos niños con autismo demuestran dificultades para procesar la información sensorial. El término "defensivo táctil" se refiere a un síntoma de disfunción de integración sensorial en el que la persona encuentra el tacto aversivo. Los signos de una actitud defensiva táctil pueden incluir: evitar tocar pintura, comida pegajosa o pegamento o interpretar el toque de un cepillo de pelo de cerdas como doloroso. Los bebés con defensiva táctil pueden evitar gatear porque interpretan el tacto en sus palmas como doloroso; pueden llorar cuando se colocan en la arena o la hierba. Perder estas importantes experiencias sensoriales tempranas afecta el desarrollo de las manos.
Disminución de la fuerza de las manos y bajo tono muscular
Los niños con bajo tono muscular tienen dificultad para agarrar objetos. (Imagen: mareks7 / iStock / Getty Images)Los niños con autismo a menudo tienen una fuerza reducida y un tono muscular bajo que los hace parecer flojos como una muñeca de trapo. Con frecuencia se deslizan fuera de sus asientos, se dejan caer sobre sus vientres y tienen manos que simplemente se sienten "blandas". Debido a que estos niños pueden evitar usar sus manos para participar en actividades de fortalecimiento como moldear arcilla, apretar botellas de pegamento o juntar partes de Tinker Toy, Sus manos carecen de fuerza y sus arcos de mano son planos..
Los niños con autismo no pueden participar en actividades de motricidad fina debido a la distracción, la preferencia por las actividades motrices gruesas y los desafíos de coordinación que dificultan el éxito cuando se utilizan herramientas de aprendizaje temprano, como crayones, tijeras o tablas de cordones. Algunos niños con autismo participan en actividades manuales repetitivas, como alinear camiones o apilar cajas que tienen un valor limitado para fortalecer las manos y desarrollar destreza..
Movimientos manuales autoestimulantes
Los niños con autismo pueden estimularse batiendo las manos delante de los ojos. (Imagen: Upyanose / iStock / Getty Images)Algunas personas con autismo pueden involucrarse en movimientos repetitivos y estereotipados con las manos, como aletear, mover los dedos delante de los ojos, jalar el cabello, chuparse el dedo, morderse las uñas o picar varias partes del cuerpo. Estas conductas se llaman autoestimuladoras; cuando causan lesiones, se les llama conductas autolesivas o SIB. Se ha teorizado que debido a la disfunción de la integración sensorial, algunos individuos anhelan la estimulación sensorial proporcionada por estos comportamientos. Otra teoría es que si una persona experimenta una sobrecarga sensorial del entorno, los comportamientos proporcionan una manera de desconectar los estímulos ofensivos.
Habilidades de manipulación atípica
Las personas con autismo pueden alinear juguetes u otros objetos. (Imagen: lilu_foto / iStock / Getty Images)Las personas con autismo y otras discapacidades del desarrollo pueden demostrar patrones de agarre atípicos y habilidades de manipulación resultantes de la actitud defensiva táctil y la disminución de la fuerza de las manos, el tono muscular y la coordinación. Pueden usar las puntas de sus dedos para agarrar un cepillo para el cabello o una cuchara y evitar la estabilización de materiales de trabajo, como el papel, mientras escriben. Las personas con autismo a menudo se benefician de las actividades que están adaptadas para proporcionar estimulación sensorial, como el uso de una pluma con peso o vibración, o para compensar la falta de coordinación, como el uso de una tabla de encaje con agujeros extra grandes.