HCG y presión arterial alta
La HCG, o gonadotropina coriónica humana, es una hormona producida en la placenta de las mujeres embarazadas. Está aprobado por la Administración de Drogas y Alimentos de EE. UU. Para el tratamiento de la infertilidad y se puede prescribir fuera de la etiqueta para otros fines. HCG también se vende como un suplemento homeopático para bajar de peso. Mientras que la FDA emitió una declaración que indica que la HCG complementaria no es dañina, según un artículo publicado en 2011 por USAToday.com, la hormona de prescripción se ha relacionado con la presión arterial alta.
HCG y pérdida de peso
La FDA no ha aprobado la hormona HCG para el tratamiento del sobrepeso o la obesidad. Sin embargo, a los médicos se les permite prescribir medicamentos que no están etiquetados según lo consideren adecuado. HCG se relacionó con la pérdida de peso en la década de 1950 cuando A.T.W. Simeons, un endocrinólogo británico, descubrió que cuando se combinaba con una dieta muy baja en calorías, la hormona ayudaba a promover la pérdida rápida de peso. Desde entonces, esa conexión ha sido ampliamente desacreditada, pero los médicos persisten en prescribir HCG para propósitos de pérdida de peso.
Riesgos de HCG
La FDA ya recibió un informe, según Christopher Kelly, un portavoz de la agencia, de que un paciente con una dieta con HCG tenía una embolia pulmonar. Una embolia pulmonar es una condición potencialmente mortal causada cuando un coágulo de sangre bloquea las arterias en los pulmones. Si bien la presión arterial alta es un factor de riesgo para la afección, según el departamento de cirugía del Baylor College of Medicine, la hormona HCG también aumenta el riesgo de desarrollar coágulos de sangre y complicaciones cardiovasculares.
Peso
Una dieta HCG es una dieta muy baja en calorías diseñada para producir una pérdida de peso rápida y significativa. Las personas atraídas a este régimen altamente restrictivo a menudo tienen sobrepeso u obesidad, ambos factores de riesgo para la presión arterial alta, según el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre. Si bien perder peso puede revertir la hipertensión, existe el riesgo de que la hormona utilizada para sofocar el hambre pueda tener efectos secundarios potencialmente peligrosos. Según un artículo de 2011 publicado en el New York Times, un médico con sede en Nueva York que supervisa a las personas que siguen una dieta con HCG requiere que los pacientes se sometan a un ECG antes del tratamiento y no aceptarán a nadie con una afección cardíaca.
HCG y Embarazo
El uso de HCG para el propósito aprobado por la FDA, como tratamiento para la infertilidad, puede causar gestación múltiple y aumentar el riesgo de preeclampsia e hipertensión gestacional: tipos de presión arterial alta asociados con el embarazo. Un estudio de 2009 publicado en "El Diario del Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos" examinó a más de 5,000 mujeres embarazadas en un esfuerzo por investigar el riesgo de hipertensión arterial y medicamentos para la infertilidad. Las mujeres que usaron tratamientos de fertilidad tenían casi el doble de probabilidades de experimentar hipertensión gestacional y preeclampsia que las mujeres que se embarazaron espontáneamente.