¿Qué efectos tiene el estrógeno en una adolescente?
El estrógeno es la principal hormona sexual femenina y desempeña un papel importante en la vida de una mujer. En la adolescencia, el estrógeno contribuye a un crecimiento y desarrollo óseos saludables e influye en los procesos reproductivos, como la menstruación y la fertilidad. El estrógeno también desempeña un papel en el desarrollo de otros sistemas corporales, incluido el corazón. Mientras que el estrógeno ocurre naturalmente en las mujeres, algunas cosas pueden alterar el equilibrio y la disponibilidad del estrógeno, lo que a veces lleva a una disminución de la densidad ósea y la amenorrea, o al cese de los períodos mensuales..
El estrógeno juega un papel importante en el crecimiento y desarrollo de los adolescentes. (Imagen: Medioimages / Photodisc / Photodisc / Getty Images)Estrógeno y Sistema Reproductivo Femenino
El estrógeno femenino es producido y secretado por los ovarios. En la primera infancia, los ovarios están relativamente inactivos y sirven como una especie de almacén para los huevos. Una vez que comienza la pubertad, la glándula pituitaria estimula a los ovarios para que comiencen a producir estrógeno y progesterona, lo que a su vez engendra la aparición de la menstruación y el proceso de madurez sexual..
Estrógeno y salud ósea
Se ha descubierto que el estrógeno desempeña un papel fundamental en el desarrollo y crecimiento de los huesos tanto en niños como en niñas. De hecho, se cree que el crecimiento acelerado que experimentan las niñas a una edad más temprana que los niños se debe a los niveles más altos de estrógeno en el inicio de la pubertad. Los niveles bajos de estrógeno en las primeras etapas de la vida pueden conducir a la osteoporosis posmenopáusica en las mujeres.
Estrógeno y salud de los senos
Cuando las niñas comienzan la pubertad, los niveles crecientes de estrógeno causan el desarrollo de los senos. La tasa y el tamaño del crecimiento de los senos es en gran medida genético, aunque la nutrición puede desempeñar un papel, ya sea para aumentar el tejido adiposo de los senos o para agotarlo. La mayoría de las niñas comienzan a crecer sus senos en la pubertad temprana, desde las edades de nueve a 11 años. En un estudio realizado por Marshall y Tanner en 1969, en el que se observó el desarrollo de 192 niñas, se observó que el crecimiento de los senos desde su inicio hasta su finalización tomó aproximadamente cuatro años..
Trastornos de la alimentación y el agotamiento del estrógeno
Los trastornos alimentarios comunes a las adolescentes, como la anorexia o la bulimia, pueden interrumpir gravemente el proceso de maduración normal. La desnutrición debida a trastornos de la alimentación puede provocar amenorrea y la disminución de los niveles de estrógeno. El bajo nivel de estrógeno causado por la alimentación desordenada se ha relacionado con el desarrollo deficiente de los huesos y la enfermedad cardíaca.
Triada de atleta femenina
La tríada de atletas femeninas, una combinación de desórdenes alimenticios, amenorrea y osteoporosis, es un síndrome común a los atletas adolescentes que entrenan rigurosamente. Se desencadena inicialmente por una nutrición inadecuada en relación con la cantidad de energía gastada cada día. A veces, este síndrome se desarrolla porque las niñas perciben que sus cuerpos recién desarrollados son "gordos". Los entrenadores, entrenadores y otros atletas o padres pueden reforzar esta imagen corporal negativa a medida que su joven atleta se enfrenta a cambios no deseados. El desarrollo de los senos y las caderas provoca una redistribución del peso, desplazando el centro de gravedad. Estos cambios pueden interferir inicialmente con el rendimiento atlético. Las chicas a menudo comenzarán a hacer dieta en esta etapa. Con el tiempo, el exceso de entrenamiento y la desnutrición conducen a la amenorrea. Esto a su vez conduce a una baja producción de estrógeno, que interfiere con la densidad ósea. Las niñas afectadas por este síndrome se vuelven altamente vulnerables a las fracturas óseas y pueden ser propensas a la osteoporosis en el futuro si el ciclo no se rompe. Los entrenadores deben conocer este síndrome, ya que sus efectos pueden impedir el desarrollo y el rendimiento de un atleta.
Asegurar niveles saludables de estrógeno en los adolescentes
Los padres pueden ayudar a sus hijas adolescentes a mantener niveles saludables de estrógeno al ayudarles a desarrollar una imagen corporal saludable y una fuerte autoestima. Al hacerlo, las niñas serán menos vulnerables a los trastornos de la alimentación. Los padres también deben ser conscientes de la regularidad con que los adolescentes menstrúan y de cuántas calorías está comiendo en relación con la cantidad de energía que se gasta diariamente. Ofrezca a su hijo un montón de alimentos saludables y nutritivos, y desaliente las bebidas a base de dieta y la comida chatarra con calorías vacías y sin valor nutricional.