¿Puede un suplemento de vitamina D causar calambres y diarrea?
En personas sanas, la vitamina D no se conoce generalmente como causa de cólicos y diarrea cuando se toma en las dosis recomendadas por el médico y como agente único. Sin embargo, cantidades excesivas de vitamina D pueden conducir a toxicidad y síntomas relacionados, algunos de los cuales son gastrointestinales..
Mujer joven con calambres en el estómago. (Imagen: AndreyPopov / iStock / Getty Images)Síntomas relacionados con el suplemento
Muchos tipos de suplementos de vitamina D también pueden incluir calcio, magnesio y zinc. Las dosis altas de magnesio provenientes de suplementos dietéticos a menudo causan diarrea que puede ir acompañada de náuseas y calambres abdominales. Las dosis excesivas de vitamina D, solas, pueden resultar en toxicidad, con una larga lista de posibles síntomas que incluyen diarrea y estreñimiento. En adultos, tomar 50,000 unidades internacionales de vitamina D al día durante varias semanas conduce a toxicidad.
Otras conexiones
Los productos lácteos pueden causar cólicos y diarrea si tiene intolerancia a la lactosa y está usando productos lácteos para complementar sus niveles de vitamina D. Si le diagnosticaron una deficiencia de vitamina D, es posible que la causa de su deficiencia también esté causando cólicos y diarrea. Por ejemplo, la enfermedad inflamatoria intestinal causa deficiencia de vitamina D, pero los síntomas principales también son cólicos y diarrea. Puede ser que se necesite más investigación para buscar una causa de la deficiencia de vitamina D, y esto también puede resolver los cólicos y la diarrea..
Posibles peligros
Consulte con su médico antes de tomar suplementos, ya que las interacciones con los medicamentos comúnmente recetados son posibles. Además de la diarrea y el estreñimiento, los síntomas de toxicidad aguda por vitamina D pueden incluir confusión, necesidad frecuente de orinar, sed, falta de apetito, vómitos y debilidad muscular.
Busque atención médica de urgencia para los cólicos y la diarrea acompañados de dolor abdominal o rectal intenso, sangre en las heces, heces negras, alquitranadas o fiebre. También esté atento a los signos de deshidratación, como disminución de la producción de orina, mareos o aturdimiento, sed, dolor de cabeza y boca seca y pegajosa.