¿Cómo afecta la alimentación saludable a la salud física, mental y social?
Comer sano es un inquilino de una vida bien equilibrada. Comer sano significa consumir lo suficiente de cada nutriente importante; elegir una variedad de alimentos de cada grupo de alimentos; y evitar el exceso de grasa, azúcar, sal y alcohol. Su salud física, mental y social está relacionada con su dieta y entre sí. Mejorar un elemento puede tener un impacto positivo en los demás. Trabajar en su salud física, mental y social mientras está mejorando su dieta fortalece sus esfuerzos en cada área, lo que lleva a una mejor sensación general de bienestar.
Una madre y su hija preparan comida saludable en la cocina. (Imagen: Digital Vision./Photodisc/Getty Images)Salud física
Los alimentos saludables proporcionan a las células de su cuerpo los nutrientes que necesitan para realizar sus funciones correctamente. Sin alimentos nutritivos, los procesos metabólicos se desaceleran drásticamente y su salud física disminuye. Los alimentos saludables también ayudan a proteger el cuerpo contra enfermedades, como las enfermedades cardíacas, la diabetes tipo II y el cáncer..
Salud mental
La falta de ciertas vitaminas y minerales, como la vitamina B12, el calcio y el hierro, se correlaciona con los síntomas de la depresión. Las nuevas madres pueden ser particularmente vulnerables a la depresión relacionada con la nutrición. Comer comidas nutritivas regularmente le brinda la energía que necesita para vivir y completar las tareas diarias necesarias para una vida feliz y equilibrada. Sin suficiente energía, es posible que no pueda lograr lo que necesita hacer, lo que puede afectar negativamente su salud mental.
Salud social
Comer alimentos saludables puede llevar a perder peso, aumentar la energía y mejorar la salud mental. Mirar y sentirse bien afecta positivamente su confianza en sí mismo. Una mayor autoestima puede hacerte más seguro socialmente, fortaleciendo tu deseo de forjar nuevas amistades y conexiones románticas. Además, comer bien puede ser una actividad social. Sentarse para comer comidas saludables y caseras puede fortalecer los lazos familiares, proporcionando un ritual para conectarse entre sí. Más allá de eso, una mejor salud física puede hacerte menos vulnerable a enfermedades debilitantes que pueden afectar tus oportunidades sociales.
Salud intelectual
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, el hambre afecta negativamente el rendimiento académico de los niños. Saltarse el desayuno puede llevar a un mal funcionamiento en la escuela. Cuando no tiene una nutrición adecuada, puede que le resulte más difícil concentrarse en aprender nueva información. Puede sentirse inquieto o distraído o desarrollar un dolor de cabeza, todo lo cual puede perjudicar el rendimiento intelectual.