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    Amamantamiento y disminución de los movimientos intestinales

    Las organizaciones de salud y la comunidad médica alientan a las mujeres a amamantar por una buena razón. Proporciona una nutrición adecuada para los bebés, además de reducir el riesgo de síndrome de muerte súbita infantil y otras afecciones de salud. También es bueno para su salud gastrointestinal, aunque puede estar dudando de que los movimientos intestinales de su bebé hayan comenzado a disminuir. Esta frecuencia reducida generalmente no es indicativa de un problema de salud.

    Movimientos intestinales normales

    Como adultos, se les dice que estén atentos a las heces negras o alquitranadas, ya que pueden ser un signo de enfermedad grave. Las heces con este aspecto son normales para los bebés durante los primeros días después del nacimiento. Meconio es el término usado para referirse a estos primeros movimientos intestinales. La lactancia frecuente durante este tiempo ayuda al cuerpo de su bebé a deshacerse de estas heces oscuras. Esto conduce a heces amarillentas que pueden ser algo líquidas. Su bebé puede tener muchos movimientos intestinales al día, posiblemente después de cada alimentación.

    Cambios

    Una disminución en los movimientos intestinales no significa que su bebé tenga una enfermedad o esté estreñido; de hecho, los bebés amamantados tienen un riesgo menor de estreñimiento. Es normal que los bebés amamantados comiencen a tener movimientos intestinales menos frecuentes con el tiempo. Esto suele ocurrir aproximadamente un mes después del nacimiento, según el Centro Médico de la Universidad de Washington. Al igual que los adultos, el cuerpo de su bebé desarrollará sus propios hábitos intestinales normales. Los bebés pueden ir varias veces al día o hacer la transición para ir solo una vez cada pocos días.

    Precauciones

    Esté atento a los cambios repentinos en los hábitos intestinales de su bebé. También debes prestar atención al color. Los tonos marrones, amarillos o verdes son comunes en los movimientos intestinales de los recién nacidos; Sin embargo, el rojo o el negro indican la presencia de sangre. Las heces blancas pueden ser un signo de problemas hepáticos. Aunque el estreñimiento no es tan común en los bebés amamantados, debe buscar consejo médico si su hijo no ha tenido una evacuación intestinal en cuatro a cinco días, según Joni Bosch, enfermera pediátrica de la Universidad de Iowa Health Care. También se debe informar sobre vómitos, heces con mucosidad, distensión abdominal y malestar estomacal, aconseja Bosch..

    Beneficios

    Además de reducir el riesgo de estreñimiento, la lactancia materna ofrece otros beneficios para la salud gastrointestinal de su hijo. La leche materna es más fácil de digerir para los recién nacidos en comparación con la leche de vaca en la fórmula para bebés. Además, la leche materna también transmite anticuerpos a su bebé que apoyan la función inmunológica. Los autores detrás de una revisión de 2008 en "The Internet Journal of Allied Health Services and Practice" destacan los beneficios de la leche materna en la reducción de enfermedades en los bebés. Algunos de los componentes de la leche ayudan a prevenir que las bacterias y otros agentes infecciosos se adhieran al tracto gastrointestinal de los bebés, según el artículo.