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    Los efectos de la temperatura corporal en la frecuencia cardíaca

    Una temperatura normal del cuerpo humano debe medir 98.6 F, según Medline Plus, un servicio de la Biblioteca Nacional de Medicina. Medline Plus también establece que un pulso normal debe ser de 60 a 100 latidos por minuto para adultos. Cada latido del corazón humano hace circular la sangre a través de los vasos, transportando oxígeno y nutrientes al resto del cuerpo. Este sistema circulatorio también es responsable del control de la temperatura en todo el cuerpo. La presión arterial podría considerarse como el sistema de calefacción y enfriamiento del cuerpo..

    Presión sanguínea

    El cuerpo humano utiliza la homeostasis para regularse internamente, a pesar de cualquier actividad en la que la persona esté involucrada o de los problemas ambientales con los que se encuentre. La regulación de la presión arterial es parte de la homeostasis. Según Creighton University Medical Center, una presión arterial normal debería ser aproximadamente 120 sobre 80. Dependiendo de la temperatura exterior, los vasos sanguíneos se dilatan o contraen. Una dilatación de los vasos sanguíneos causará una caída en la presión arterial, y esto disminuye la temperatura corporal. Los vasos contratantes aumentan la presión arterial, lo que resulta en un aumento de la temperatura central.

    Mantener la temperatura

    La temperatura corporal interna de una persona aumenta cuando hace ejercicio, o si tiene fiebre. Normalmente una persona transpira para refrescarse. Esto hace que pierda líquido y se deshidrate. Como resultado, el cuerpo tiene que encontrar otra forma de enfriarse, de modo que los vasos sanguíneos se dilaten. Esto disminuye la presión dentro de las venas, permitiendo que la sangre se enfríe.

    Ritmo cardiaco

    La presión arterial es una medida de la fuerza aplicada a las paredes internas de los vasos sanguíneos. La presión es el resultado de la cantidad de sangre que se bombea y el ancho de los vasos sanguíneos en sí mismos. Cuando los vasos sanguíneos se dilatan como respuesta al aumento de la temperatura corporal, el corazón tiene que bombear más rápido para mantener la presión arterial.