Daño de hígado y ajo
El ajo puede prevenir y revertir el daño hepático. Las fuertes acciones antioxidantes del bulbo están en la raíz de su poder terapéutico. El ajo es un complemento potencial de la atención médica convencional si tiene daño hepático. Hable con su médico acerca de qué remedios herbales son adecuados para usted..
Dientes de ajo en un tazón (Imagen: Barbara Dudzińska / iStock / Getty Images)Bases de ajo
El científico francés Louis Pasteur proporcionó la primera prueba científica occidental de la capacidad del ajo para prevenir la infección en 1858, según el médico Deepak Chopra, MD, autor de "The Chopra Center Herbal Handbook". El ajo, o Allium sativum, posee más de 200 componentes químicos y Ha sido objeto de miles de estudios. Ha demostrado la capacidad de tratar enfermedades cardiovasculares y combatir patógenos como bacterias y virus. El ajo también se ha investigado por su potencial como tratamiento antibacteriano para Helicobacter pylori, una bacteria que causa la mayoría de las úlceras pépticas y duodenales..
Acerca de su hígado
El término enfermedad hepática o hepática se refiere a cualquier problema médico que cause una función hepática reducida. Según la Fundación de la Hepatitis B, el hígado se vuelve disfuncional cuando el 75 por ciento de su tejido está comprometido. Los biólogos clasifican el hígado como una glándula y un órgano, y es el órgano sólido más grande del cuerpo. Entre las causas del daño hepático se encuentran el abuso de alcohol, infecciones virales como la hepatitis y enfermedades genéticas..
El ajo rescata a los hígados de rata
En una edición de 2011 del "Indian Journal of Experimental Biology", los investigadores alimentaron a las ratas con un compuesto de plomo durante siete días y luego midieron la cantidad de lesión hepática inducida. Luego les dieron a las ratas un extracto de agua de ajo fresco, lo que redujo la cantidad de daño hepático. Ellos teorizaron que esto se debía a las capacidades antioxidantes del ajo. Los antioxidantes cazan y desactivan las moléculas de oxígeno inestables que causan daño celular. En otro estudio en animales, los científicos usaron alcohol para inducir daño hepático en ratas y luego les dieron extracto de ajo negro, lo que aumentó las enzimas hepáticas antioxidantes. También redujo el daño del ADN a las células sanguíneas inmunes blancas llamadas linfocitos, como se informó en la edición de 2011 de "Journal of Medicinal Food". Se deben completar más estudios en humanos antes de que se pueda recomendar el ajo como terapia para la enfermedad hepática.
Interacciones de la medicación del ajo
Aunque el ajo tiene una gran cantidad de beneficios para la salud, puede interactuar con ciertos medicamentos, advierte el Centro Médico de la Universidad de Maryland. En este grupo se incluyen los medicamentos antiplaquetarios, como la indometacina y la aspirina. Además, el ajo tiene el potencial de interactuar con productos farmacéuticos que diluyen la sangre y causar sangrado. Evite los suplementos de ajo si está en inhibidores de la proteasa. Hable con su médico antes de agregar cualquier suplemento nutricional para la enfermedad hepática.