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    Cómo tratar un tendón roto

    El tendón de la corva es un músculo en la parte posterior del muslo. Endereza y gira la pierna y dobla la rodilla. Un tendón de la corva o estirado puede causar algunas molestias al enderezar la pierna y, si es lo suficientemente grave, puede hacer que sea doloroso caminar. El tratamiento adecuado del músculo estirado es importante, no solo para prevenir una lesión más grave sino también para acelerar el tiempo de recuperación. El método PRICE (Prevención, Descanso, Hielo, Compresión y Elevación) se usa generalmente para tratar un músculo desgarrado, dice el American College of Sports Medicine.

    Utilice PRECIO para una recuperación rápida

    Paso 1

    Proteja el tendón de la corva de una lesión mayor, siempre el primer paso en el tratamiento. Cualquier actividad que causó el desgarro debe evitarse hasta que el tendón de la corva esté completamente curado.

    Paso 2

    Descanse el tendón roto. Cada vez que experimente dolor en el tendón de la corva, debe interrumpir la actividad. Esta es la forma en que su cuerpo le dice que algo está mal. Descansar el músculo promoverá la curación del músculo y conducirá a una recuperación más rápida.

    Paso 3

    Aplique hielo y compresión en el tendón de la corva desgarrado para aliviar la hinchazón dolorosa y el flujo de sangre al músculo lesionado. La regla general para aplicar el hielo o la compresa fría es de 20 minutos y 20 minutos de descanso durante las primeras 24 horas después de la lesión, aconseja el American College of Sports Medicine. Proteja la piel envolviendo el hielo o la compresa fría en un paño o toalla y luego envuélvalo alrededor de la pierna con una venda elástica para comprimir. Recuerde no envolver demasiado apretado para que la circulación no se corte a otras áreas del cuerpo. A medida que el dolor y la hinchazón disminuyen, suspenda el uso de las compresiones frías..

    Etapa 4

    Eleve el tendón de la corva lesionado para reducir la hinchazón y evitar que la sangre se acumule. Esto se puede hacer no solo durante la fase de hielo y compresión, sino que también se recomienda que lo haga con la mayor frecuencia posible. La mejor manera de elevar es apoyar el pie en un taburete o colocar una almohada debajo del pie o la rodilla mientras está acostado. Elevar la lesión también ayuda a reducir la sensación palpitante que se produce cuando se bombea sangre al músculo lesionado.

    Cosas que necesitarás

    • Bolsa de hielo o compresa fría

    • Paño o toalla

    • Envoltura elástica o venda

    • Almohada o taburete

    Propina

    Es importante recordar que si se sospecha más de una lesión menor debido a una inflamación severa o la incapacidad de poner peso en la pierna, busque ayuda llamando a un profesional de la salud. Dentro de 48 a 72 horas, si se trata adecuadamente, el tendón de la corva debería estar en camino de recuperarse, dice el American College of Sports Medicine.