Tengo un quiste en el hueso de mi mejilla
Los quistes epidermoides, comúnmente llamados quistes sebáceos, son protuberancias que se desarrollan debajo de la superficie de la piel, en particular la piel de la cara, el cuello y el tronco. Los quistes sebáceos generalmente no son peligrosos, aunque los quistes grandes, especialmente en la cara, pueden afectar la apariencia o interferir con la vida diaria. El quiste en el hueso de la mejilla probablemente disminuirá con el tiempo y la atención adecuada en el hogar, pero si se vuelve muy grande o está infectado, su médico puede extirparlo quirúrgicamente..
Los síntomas
Si la protuberancia en el hueso de la mejilla es un quiste, es probable que tenga forma redonda y de color amarillo o blanco. Deberías poder moverlo fácilmente con la punta de tus dedos. Su tamaño puede variar desde menos de 1/4 de pulgada hasta 2 pulgadas de diámetro. Un quiste sebáceo generalmente no es doloroso, pero si se infecta, puede experimentar sensibilidad, enrojecimiento o hinchazón. Una sustancia blanca o amarilla puede drenar del quiste..
Causas
Los quistes sebáceos normalmente son causados por una proliferación anormal de células de la piel que resulta en un folículo piloso bloqueado. Una lesión de la piel, una afección inflamatoria de la piel o una ruptura de la glándula sebácea pueden hacer que las células de la piel se multipliquen anormalmente y bloqueen un folículo piloso, creando las paredes de un quiste sebáceo. Las células de la piel que forman la pared del quiste secretan una proteína llamada queratina en el interior del quiste, lo que le confiere una forma redonda y un color blanco o amarillo. Las personas con acné o heridas quirúrgicas tienen un mayor riesgo de desarrollar un quiste sebáceo.
Tratos
El tratamiento en el hogar para un quiste sebáceo consiste en aplicar compresas tibias al quiste para promover el drenaje. La mayoría de los quistes se resuelven sin tratamiento médico. Para los quistes muy grandes que están infectados o son de interés cosmético, su médico puede recetarle antibióticos, inyectar un esteroide en el quiste o drenar el quiste para reducir la inflamación. Su médico también puede extirpar quirúrgicamente todo el quiste usando una escisión tradicional o un láser de dióxido de carbono que minimiza las cicatrices..
Complicaciones
Ocasionalmente, los quistes sebáceos infectados pueden romperse y formar abscesos dolorosos que requieren tratamiento inmediato, incluidos antibióticos, cirugía o ambos. Estos quistes abscesos pueden regresar después de la extirpación quirúrgica. En casos raros, los quistes sebáceos pueden causar cáncer de piel basal o escamoso. Sin embargo, esto ocurre tan raramente que los quistes generalmente no se realizan una biopsia a menos que estén inmóviles, sólidos, infectados o tengan otras características extrañas..
Cuándo ver a un doctor
La mayoría de los quistes sebáceos no son dañinos, pero es importante consultar a un médico si sospecha que su piel se ha infectado. Los signos de infección incluyen sensibilidad, enrojecimiento e hinchazón alrededor del quiste, y un drenaje espeso, amarillo, a veces desagradable. Haga una cita con un profesional de la salud si tiene un quiste que se vuelve doloroso, crece rápidamente, se rompe o vuelve a aparecer en el mismo lugar. El médico debe examinar cualquier protuberancia dura e indolora en la cara para detectar signos de cáncer de piel..