¿Puede la deficiencia de vitamina D causar fascículos de calambres musculares?
Síntomas musculocetales
Los niveles bajos de vitamina D pueden causar debilidad muscular y dolor en los huesos. La vitamina se almacena en el hígado, donde luego se metaboliza. Debido a que la vitamina D es necesaria para la formación y el crecimiento de los huesos, la deficiencia disminuye la absorción de calcio en el cuerpo y con frecuencia conduce al dolor musculoesquelético. Las personas con deficiencia de leve a moderada pueden experimentar debilidad muscular, dolor, entumecimiento u hormigueo y calambres musculares y contracciones, también conocida como fasciculación. Un estudio realizado en la Escuela de Medicina de la Universidad de Michigan encontró que los pacientes de hospital con dolor muscular y esquelético inexplicables tenían más probabilidades de tener deficiencia de vitamina D, independientemente de la edad. Esto llevó a los investigadores a concluir que las personas con dolor inexplicable deben someterse a una prueba de vitamina D.
Osteomalacia
El dolor en las piernas es un síntoma común de la deficiencia de vitamina D. La osteomalacia es una condición que se refiere al ablandamiento de los huesos. Aunque puede que no haya síntomas al principio, con el tiempo, la osteomalacia empeora, causando síntomas como dolor en las piernas y en la parte inferior de la columna vertebral, debilidad muscular en los brazos y piernas y disminución del tono muscular. Las causas de la osteomalacia incluyen una ingesta inadecuada de vitamina D y una exposición insuficiente a la luz solar. El cuerpo necesita vitamina D para tener huesos fuertes, al igual que necesita absorber la luz solar adecuada para producir vitamina D en la piel. Las personas en riesgo son personas que pasan poco tiempo bajo la luz del sol o viven en áreas con smog o regiones geográficas donde las horas de luz son cortas durante ciertas estaciones del año. Las personas mayores que residen en centros de atención a largo plazo corren un riesgo particular.
Impulsos eléctricos
Las deficiencias en la vitamina D o los minerales calcio y magnesio pueden causar contracciones musculares. Muchas veces se producen espasmos en las manos, piernas y pies y se acompaña de entumecimiento y hormigueo. Estas contracciones musculares involuntarias son pequeñas contracciones que con mayor frecuencia afectan los músculos individuales. A veces, los impulsos eléctricos a lo largo de las vías nerviosas comienzan a fallar de manera impredecible, causando que los músculos en diferentes lugares del cuerpo se contraigan y se relajen. Mientras que una persona no puede controlar la contracción, la mayoría de las veces es menor. Las deficiencias en la dieta a menudo son responsables de estas fibras nerviosas motoras que disparan impulsos aleatorios desde el cerebro o la médula espinal. La vitamina D juega un papel en la regulación de los procesos celulares en el sistema nervioso y el tejido muscular. La tetania, otra condición causada por la falta de calcio o niveles bajos de magnesio, se caracteriza por contracciones musculares involuntarias.