¿Cuáles son las mayores barreras para comer sano?
Comer una dieta saludable es importante para controlar el peso y prevenir o controlar muchas afecciones crónicas. Sin embargo, comer una dieta saludable significa planificar las comidas y tomar tiempo para comprar productos. A veces, comer de manera más saludable también significa gastar más dinero en la tienda de comestibles, y todo lo anterior puede disuadir a algunos de comer de la forma más saludable que deberían. Si tiene problemas para comer de manera saludable, hable con un dietista registrado que pueda ayudarlo a elaborar un plan que se ajuste a su presupuesto, al tiempo que reduce su riesgo de enfermedad..
El costo, la falta de tiempo y la confusión pueden llevar a la elección de alimentos poco saludables. (Imagen: Purestock / Purestock / Getty Images)Cambiando los hábitos establecidos
Comer no consiste solo en proporcionar al cuerpo las calorías y los nutrientes que necesita, y es posible que se hayan establecido ciertos comportamientos alimenticios durante la infancia. Comer proporciona una forma de socializar con otros, ciertos alimentos pueden asociarse con emociones positivas y, a veces, los alimentos se usan para lidiar con emociones subyacentes como el aburrimiento, la ansiedad, la soledad y otros. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan mantener un diario de los alimentos sobre qué y por qué come para poder identificar los problemas. Comience cambiando los patrones de pensamiento, como tener que limpiar siempre su plato y no desperdiciar alimentos, comer debido a la presión de amigos o familiares, comer mientras realiza otras tareas o comer porque es reconfortante. Todo lo anterior puede llevar a comer en exceso y a una mala elección de alimentos. Cambie sus hábitos lentamente seleccionando un disparador a la vez y desarrolle formas alternativas de pensar y sobrellevar la situación.
Falta de tiempo
Un estilo de vida agitado y comer a la carrera pueden llevar a la elección de alimentos poco saludables. Agarrar lo que esté disponible cada vez que tenga tiempo puede prepararlo para los malos hábitos alimenticios. Revise sus gabinetes y el refrigerador para deshacerse de la comida chatarra y reemplácelo con opciones más saludables. Piense con anticipación y compre carnes y verduras que ya están cortadas para reducir el tiempo de preparación. Elija frutas o verduras que se conservan en su propio jugo o agua, sin azúcar ni sal agregada. El calor, la luz y el aire pueden robar a sus frutas y verduras sus nutrientes, por lo que comprar versiones enlatadas o congeladas que se empaquetan justo después de ser recolectadas, a menudo contienen más nutrientes que los alimentos frescos que se han enviado, según la Clínica Cleveland. Cuando cocine, haga porciones más grandes y congele un poco para que tenga comidas listas para calentar. Algunas tiendas de comestibles ofrecen compras en línea y entregas a su hogar, lo que le ahorra un viaje a la tienda. Estas cosas pueden ayudarlo a ahorrar tiempo y energía para que comer más sano sea más fácil.
Demasiada información
Las noticias, revistas e Internet están llenos de información sobre lo que implica comer de manera saludable, y puede ser confuso saber qué es verdad y qué no lo es. Hay tantos planes de dieta que pretenden ayudarlo a perder peso rápidamente o prevenir y controlar enfermedades del corazón y otras afecciones. En general, los estadounidenses consumen demasiadas calorías y altas cantidades de grasas no saludables, azúcar, sal y granos refinados. La mayoría no obtiene suficiente potasio, fibra, calcio, vitamina D y grasas saludables, informa el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. El objetivo es comer una dieta bien balanceada que contenga de tres a cinco porciones de frutas y verduras al día, y una porción es solo 1 taza. Lea las etiquetas de nutrición y procure obtener entre 25 y 35 g de fibra y 1,500 mg o menos de sal por día. El consumo de grasas no debe representar más del 30 por ciento de su ingesta total de calorías y la mayor parte debe provenir de grasas no saturadas. Puede ser difícil y lento planificar un menú, pero existen sitios web gratuitos que pueden ayudarlo a comenzar.
Costo
La comida chatarra a menudo es menos costosa que la comida saludable, y cuando usted tiene un presupuesto ajustado, la alimentación saludable puede ser un desafío. La Clínica Mayo sugiere aprender a llenar su despensa con lo esencial y hacer una lista de la compra antes de dirigirse a la tienda. Mire a través de circulares de supermercados, recorte cupones y encuentre las ventas para estar preparado y tener una lista para cumplir. Pruebe una o dos comidas sin carne cada semana y vaya a una cena a base de vegetales, frijoles o granos integrales, ya que las carnes pueden ser caras. Verifique si su tienda de comestibles tiene una tarjeta de comprador en la que gana puntos que pueden convertirse en ahorros. Todo lo anterior puede sumar algunos ahorros reales y ayudarlo a comer de manera más saludable..