Remedios caseros para una quemadura de sol de segundo grado
La exposición al sol puede provocar síntomas como enrojecimiento intenso de la piel, ampollas, dolor intenso e hinchazón. Estos signos indican que las primeras dos capas de su piel se quemaron con el sol y que usted tiene una quemadura de segundo grado. Si bien es grave, puede tratar este tipo de quemaduras en casa si es pequeña y no cubre su cara, manos o pies. Consulte a un médico de inmediato si su quemadura es más grave o si los síntomas empeoran..
Piel fresca
Una de las mejores y más fáciles acciones que puede tomar para tratar su quemadura solar es enfriarla. Si lo hace de inmediato, ayuda a detener el proceso de quemado lo antes posible en su piel. También aliviará el dolor. Cuando enfríe una quemadura de segundo grado, debe correr bajo agua fría, no fría. También puede saltar en una bañera de agua fría y sumergir su quemadura, o cubrir el área afectada con una compresa fría. Sin embargo, no debe poner hielo en una quemadura, advierte la Clínica Mayo, ya que esto puede causar más daño..
Hidratar la piel
Si su piel está muy roja pero no presenta ampollas, MedlinePlus, un servicio de la Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU. Y los Institutos Nacionales de la Salud, recomienda la hidratación. Humedezca con una crema o loción suave que contenga aloe u otros ingredientes hidratantes. Nunca use ungüentos como la vaselina, ya que solo empeorarán su quemadura.
Ampollas de la cubierta
Si su piel está inflamada y con ampollas, cúbrala con una gasa estéril. Envolver un vendaje de manera ligera pero segura alrededor del área quemada protegerá el área mientras sana. Las áreas con ampollas son especialmente vulnerables a las infecciones, y dejarlas intactas y cubiertas es la mejor manera de ayudar a que la piel se cure por sí misma, según la Clínica Mayo.
Toma un analgésico
Las quemaduras solares de segundo grado son dolorosas, y tomar un analgésico de venta libre puede disminuir el dolor que siente hasta que sane. Lawrence E. Gibson, M.D., recomienda tomar medicamentos antiinflamatorios hasta que desaparezcan los síntomas dolorosos. Algunas personas responden de manera diferente a diferentes medicamentos, y es importante tomar uno que funcione mejor para usted. En general, los adultos deben tomar la aspirina, el paracetamol es más seguro para los niños y adolescentes, y el ibuprofeno puede ser una buena opción para niños, adolescentes y adultos. Consulte a un farmacéutico en su farmacia si no está seguro de qué analgésico es mejor para usted.