¿Es el aceite de menta antibacteriano o antimicótico?
La menta no solo es una de las hierbas medicinales más antiguas del mundo, sino que también es una de las más versátiles. El aceite esencial, derivado de sus hojas, ha sido valorado durante mucho tiempo por los herbolarios y los curanderos naturales por su gran cantidad de efectos terapéuticos, que incluyen propiedades antiespasmódicas y analgésicas. Aunque no se han realizado estudios clínicos sobre los efectos antibacterianos y antimicóticos de la menta, los investigadores han explorado los efectos antimicrobianos de la menta en estudios de laboratorio o in vitro. Consulte a su médico antes de usar menta..
La menta es una de las hierbas más versátiles del mundo. (Imagen: matka_Wariatka / iStock / Getty Images)Caracteristicas
El aceite de menta se deriva de las hojas de la planta conocida botánicamente como Mentha x. piperita, una hierba perenne con tallos cuadrados, de color verde púrpura y flores de color lila o púrpura. Se utilizan dos variedades diferentes de menta (blanco y negro) para producir aceite farmacéutico de menta. La menta blanca muestra hojas de color verde claro, mientras que las hojas de menta negra son de color verde oscuro. La menta se usó en la antigua Grecia y Egipto como saborizante y medicina culinaria, y se empleó en los sistemas de curación tradicionales ayurvédicos y chinos para tratar resfriados, calambres, dispepsia, náuseas, dolor de garganta y dolor de muelas. La menta se usa actualmente para tratar las molestias digestivas, los dolores de cabeza, los cólicos menstruales y la tos, y se usa como ingrediente para calentar y enfriar las preparaciones tópicas para aliviar el dolor. También se usa comercialmente como saborizante en caramelos y chicles..
Constituyentes y efectos
El mentol, un compuesto cristalino incoloro, constituye del 29 al 48 por ciento del aceite de menta esencial y es el componente principal. También están presentes más de 100 otros constituyentes, incluyendo mentones, ácido cafeico, flavonoides y taninos. Sus cantidades varían dependiendo de la región en la que se cultiva la menta. La menta muestra propiedades antimicrobianas en estudios de probetas, inhibiendo una amplia variedad de patógenos. La menta muestra potentes efectos antibacterianos in vitro, así como efectos antifúngicos algo más débiles. La menta es activa contra los hongos dermatofíticos, que causan pie de atleta y tiña, en estudios de probeta. La menta también tiene efectos antivirales in vitro, que inhiben el crecimiento de los virus de la influenza y el herpes..
Investigación
En un estudio in vitro publicado en 2001 en "Microbios", los investigadores encontraron que los aceites esenciales de menta inhibían el crecimiento de muchos patógenos bacterianos comunes, como E. coli, H. pylori, S. aureus, salmonella y Staphylococcus aureus resistente a la meticilina, o MRSA. Llegaron a la conclusión de que el aceite de menta tenía potencial como agente antibacteriano. En un estudio publicado en 2002 en "Journal of Agricultural and Food Chemistry", los investigadores encontraron que el mentol en el aceite de menta inhibía los microorganismos fúngicos.
Dosis y consideraciones
El aceite de menta, que está disponible en cápsulas con cubierta entérica, se puede tomar en dosis de una a dos cápsulas de 2 mL dos a tres veces al día. También puede preparar té de menta vertiendo una taza de agua hirviendo sobre 5 g de las hojas secas y dejándolas reposar durante diez minutos; Bebe de 3 a 4 tazas al día. No tome menta si tiene acidez estomacal, hernias de hiato o enfermedad de reflujo gastroesofágico; disminuye la presión de los músculos esofágicos y puede empeorar los síntomas. No debe aplicar aceite de menta en la cara, especialmente debajo de la nariz de un niño o bebé. Las reacciones adversas a la menta incluyen dermatitis de contacto, enrojecimiento y dolor de cabeza. El aceite de menta podría interactuar con los medicamentos recetados. Consulte a su médico antes de tomar aceite de menta; No lo tome si está embarazada o amamantando..