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    Cómo calmar a un niño salvaje de 3 años

    Para cuando su hijo cumpla 3 años de edad, ya habrá terminado con los comportamientos que son característicos de los "2s terribles". Los niños de dos años generalmente son egocéntricos. No les gusta compartir, interactúan mal con otros niños y carecen de autocontrol, empatía y habilidades sociales. La mayoría de los niños de 3 años son más capaces de autocontrol, independencia y conciencia de las necesidades de los demás. Un niño de 3 años que está fuera de control y no coopera necesita ayuda para aprender comportamientos más apropiados en un ambiente de amor y apoyo..

    La comunicación con un niño puede ayudar a su comportamiento. (Imagen: Jack Hollingsworth / Digital Vision / Getty Images)

    Paso 1

    Proporcione a su hijo reglas simples y claras que se apliquen constantemente, lo que significa que debe atenerse a sus decisiones y no cambiar de opinión una vez que su hijo comience a actuar. Esto le enseña que las rabietas son ineficaces..

    Paso 2

    Haga su hogar a prueba de niños para que pueda jugar y explorar de manera segura sin romper cosas o lastimarse. Guardar los artículos frágiles y designar áreas de juego disminuye el número de reglas que debe recordar y le permite funcionar sin corrección constante.

    Paso 3

    Cree y mantenga un horario diario para su hijo de 3 años. Los niños con horarios no definidos a menudo exhiben un comportamiento inapropiado y tienen dificultades para entender qué se espera de ellos. Una rutina consistente ayuda a los niños a sentirse seguros y tranquilos con menos ansiedad y estrés. El horario debe incluir las comidas, las siestas y la hora de acostarse a la misma hora todos los días, pero debe dejar espacio para la flexibilidad. Incluya diferentes tipos de actividades, tranquilas y activas, para mantener a su hijo ocupado aprendiendo y haciendo.

    Etapa 4

    Mantenga la calma cuando responda al comportamiento inapropiado de su hijo. Su respuesta (tono firme, sin gritos y sin lenguaje degradante) es fundamental para ayudarla a mejorar su comportamiento..

    Paso 5

    Explique a su hijo de 3 años por qué su comportamiento es inapropiado y cuáles son las consecuencias para el comportamiento..

    Paso 6

    Aplicar tiempos de espera como castigo. KidsHealth recomienda usar tiempos de espera modificados para niños de 3 años. En lugar de límites de tiempo específicos, finalice el tiempo de espera cuando su hijo se haya calmado para comprender mejor lo que significa el autocontrol. Su tiempo de espera no debe exceder los tres minutos, o un minuto por cada año de su edad..

    Paso 7

    Enseñe a su hijo sobre el autocontrol permitiéndole verle responder a las decepciones con calma. Hable con ella sobre situaciones frustrantes y permítale ayudarlo a encontrar soluciones.

    Paso 8

    Anime a su hijo de 3 años a usar palabras para expresar su enojo o frustración. Mejorar su capacidad para expresarse limita la necesidad de rabietas.

    Paso 9

    Refuerce las lecciones que desea que su hijo aprenda mediante elogios y elogios cuando sigue las reglas, usa el autocontrol en situaciones frustrantes o muestra amabilidad. El refuerzo positivo alienta a su hijo a comportarse adecuadamente, le brinda la atención que necesita y le brinda un entorno de apoyo..

    Paso 10

    Hacer cumplir las reglas de forma continua y consistente. La disciplina debe ser continua para ser efectiva, de acuerdo con Healthy Children. Parte de la disciplina es enseñar y modelar el comportamiento apropiado..

    Propina

    Las rabietas suelen comenzar cuando un niño tiene entre 2 y 3 años de edad. Los berrinches deberían comenzar a disminuir cuando el niño tiene 4 años. Azotar o golpear a su hijo le enseña que está bien golpear a alguien cuando está enojado.

    Advertencia

    Comuníquese con su pediatra si el comportamiento agresivo de su hijo es inusualmente violento y los episodios son frecuentes o han ocurrido durante más de unas pocas semanas. Póngase en contacto con su pediatra si sospecha que su hijo puede tener retrasos en el desarrollo, lo que puede provocar enojo, pérdida de control y habilidades sociales deficientes. Su médico puede dirigirlo a recursos que pueden ayudar a descartar la hiperactividad o el trastorno por déficit de atención e hiperactividad..