¿Qué sucede si sigo corriendo incluso si tengo Shin Splints?
Las férulas de Shin, o el síndrome de estrés tibial medial, es una lesión común para los corredores. Los síntomas incluyen sensibilidad al lado de la tibia, o hueso de la espinilla, y dolores agudos en esa área al correr. A menudo se convierten en problemas crónicos o recurrentes porque tardan en curarse y se vuelven a lesionar fácilmente, una mala combinación.
Una mujer en una pista sosteniendo su pierna en el dolor. (Imagen: Tomwang112 / iStock / Getty Images)¿Qué son las férulas de Shin??
El área primaria de la lesión con calambres en la espinilla es el músculo tibial anterior. Cuando corres o caminas, usas este músculo para evitar que tu pie golpee el suelo cuando caes sobre tu talón. El músculo actúa como un freno para el pie y cada paso provoca una sacudida del músculo, explica el sitio web de la Clínica de Lesiones Deportivas. La lesión no es en el músculo sino en las uniones entre el músculo y el hueso..
Por qué son lentos para sanar
El músculo está unido al periostio, el tejido delgado, resistente y transparente que cubre todos los huesos. El periostio está unido al hueso por múltiples ligamentos diminutos. El movimiento brusco de la carrera hace que esos ligamentos se rasguen y se separen del hueso. Esto se parece más a un esguince que a una distensión muscular y, por ese motivo, su recuperación es más lenta. También se vuelve a lesionar fácilmente porque usamos ese músculo de nuevo cada vez que caminamos.
¿Por qué no debes seguir corriendo?
A medida que la lesión se cura, su cuerpo crea tejido cicatricial para parchar la lágrima y mantener el periostio sobre el hueso. Cada nueva lesión lágrimas que cicatrizan el tejido y tienes que hacer más. Cuanto más tejido cicatricial se forme en el área, más débil será la reparación definitiva. Eso significa que se lesionará más fácilmente en el futuro y es posible que tenga que comenzar el proceso de curación nuevamente..
Prevención
Si tiene calambres en las piernas, debe ser serio al tratarlos, y debe ser aún más serio para evitar que vuelvan. El hielo, las compresas de compresión, el masaje y el estiramiento de los músculos de la parte inferior de la pierna pueden ayudar. Si su caso no responde a ese tipo de cuidado conservador, debe buscar ayuda profesional de un médico, quiropráctico o terapeuta orientado al deporte..